La evolución, concepto central de la biología y de todas las ramas que derivan de ella, y que explica el cambio en las poblaciones biológicas, también sirve para hablar de crecimiento y modernización. En este marco, el Instituto Nacional de Medicina Genómica celebra su décimo tercer aniversario como centro de investigación pionero y de vanguardia en el estudio del genoma de los mexicanos.

En una conmemoración que reunió a toda la comunidad del Instituto, el doctor Xavier Soberón Mainero, director general, dio unas palabras de reconocimiento por el trabajo diario y constante de todos los que lo conforman. "Al reflexionar sobre el cumpleaños del Instituto, un punto central es la evolución. Este concepto funciona como hilo conductor para la reflexión sobre la institución".

El director general hizo una analogía con aquellos procesos biológicos de cambio que se dan en un mismo individuo, al recordar que "en el desarrollo, hay un momento clave: pensemos en los humanos, en la adolescencia, y la transformación. O los insectos y la metamorfosis. El INMEGEN se puede parecer a esto".

Como en la naturaleza, el doctor Soberón comentó que las instituciones tienen esta responsabilidad de renovarse indefinidamente. Dijo que, "corresponde a las personas que las constituyen realizar acciones que lleven a esta evolución. Lo que hagamos tendrá efecto en nuestro deber diario, pero también a largo plazo. Esto será la fortaleza de esta Institución, una que nunca envejecerá".

Finalmente, invitó a la comunidad del Instituto a tener una visión de trascendencia, en tanto que nuestro trabajo actual será juzgado con los años. "Estamos viviendo una transición muy profunda en la salud, producto de la medicina genómica y de precisión. Hoy, en el modelo de salud mexicano actual, la estamos posibilitando", concluyó.

Para dar paso a la segunda parte de la ceremonia, el doctor Soberón felicitó a las personas que cumplieron diez años de labores, y recibió a aquellos que se han integrado en el último año. Ante esto, mencionó que "los que cumplen diez años representan la experiencia de los procesos que se vienen gestionando en el Instituto, y los nuevos traen consigo las ideas frescas sobre lo que se debe integrar".

Al terminar la entrega de reconocimientos, la comunidad del Instituto disfrutó de una convivencia amenizada con el pastel de aniversario.